La Hiperhidrosis es una sudoración excesiva en alguna parte del cuerpo. Esta sudoración se produce por una falta de regulación en los mecanismos que deben controlarla, y por tanto no cumple la función propia de la sudoración de regular la temperatura. La zona más frecuentemente afectada son las palmas de las manos, donde el sudor excesivo puede ser muy incapacitante.
¿Dónde aparece la hiperhidrosis?
Otras zonas en las que se puede producir hiperhidrosis focal son las axilas, la cara y las plantas de los pies.
Usamos nuestras manos en nuestras relaciones sociales, en el trabajo (ordenador, papeles, trabajos manuales,…) y en la mayoría de las actividades de nuestra vida diaria. La hiperhidrosis puede mermar nuestra capacidad para realizarlas: las personas que padecen hiperhidrosis suelen evitar saludar dando la mano, pueden mojar los papeles o el teclado del ordenador que necesitan para su trabajo, o si trabajan con personas (peluquería, fisioterapeutas, tatuadores,…) el sudor puede dar mala imagen a sus clientes.
Además, la sudoración en ocasiones se interpreta como signo de nerviosismo, lo que puede dar una imagen errónea del estado anímico de la persona que lo padece. Como veremos en otras entradas del blog, la hiperhidrosis es una patología orgánica, que se produce por una
incorrecta regulación en los mecanismos que la tienen que controlar, y no por un estado de ansiedad que produzca dicha sudoración.
Si alguna vez te has preguntado ¿por qué me sudan tanto las manos?, y te ves reflejado en las situaciones que hemos descrito, es posible que padezcas hiperhidrosis palmar.
Tratamiento de la Hiperhidrosis
La hiperhidrosis, en su forma más común, puede ser tratada de manera efectiva mediante diversas opciones terapéuticas.
Uno de los tratamientos más avanzados es la simpatectomía torácica. Aunque conocida desde hace décadas, su aplicación moderna ha sido optimizada gracias a la video-toracoscopia. Esta técnica mínimamente invasiva permite la desconexión selectiva de la inervación simpática, reduciendo significativamente la sudoración excesiva en manos, axilas y cara. Los resultados son altamente efectivos, con un éxito del 99% en manos y más del 85% en cara. En el caso de las axilas, los resultados iniciales son positivos, alcanzando hasta un 75% de éxito a largo plazo.
Para aquellos que padecen exclusivamente hiperhidrosis axilar, existen tratamientos tópicos como el cloruro de aluminio. Si estos no resultan eficaces, se puede recurrir a inyecciones de toxina botulínica, cuyo efecto dura entre 3 y 5 meses, requiriendo sesiones periódicas.
Existe también un procedimiento quirúrgico. La intervención quirúrgica para la hiperhidrosis se realiza mediante dos pequeñas incisiones. La operación se lleva a cabo bajo anestesia general y tiene una duración aproximada de 20 minutos. Los efectos de la operación son inmediatos, proporcionando un alivio significativo y duradero de la sudoración excesiva. Puedes leer más aquí: [LEER MÁS]
0 comentarios